Siempre me he preguntado
cual es la causa de que existan personas que pueden ser felices en la vida,
disfrutan a tope de todo lo que hacen y por tanto tengan una vida de éxito. Sin
embargo, otras veo que no terminan de arrancar, no se conforman con nada,
siempre con quejas y por tanto su vida no es tan buena como se merecen y viven
una vida basada en la mediocridad.
En anteriores post he
hablado de la actitud, del amor, de formación, innovación basada en las
personas, etc que nos permite cultivar nuestro mejor “yo”, el más auténtico
para que crezca y se desarrolle para encontrar nuestra verdadera misión en la
vida que es la felicidad (brillar y ser la luz para el mundo).
Hoy, quiero seguir
aportando al mundo aspectos a tener en cuenta para el desarrollo y el
crecimiento personal y por eso me voy a centrar en la mente; os voy a hablar
del poder de la mente. Me gustaría poder recibir vuestras aportaciones y
comentarios que seguro que enriquecen todo lo que yo os cuento aquí.
Y es que me he dado cuenta
de lo importante que es la mente para alcanzar una vida mejor, de lo importante
que es lo que pensamos y lo que nos decimos a nosotros mismos. Sabemos que lo
que pensamos, condiciona lo que sentimos y de ahí lo que hacemos y por tanto de
la actitud.
Tan importante son los
pensamientos que podemos programarnos a nosotros mismos para poder convertirnos
en la persona que queramos y hacer todo aquello que nos propongamos. ¿Y todo
ello para que ? Para ser más felices, y más válidos tanto para nosotros mismos como
para los demás. Y de esta manera con esta programación positiva no solamente
podemos pensar y sentir cosas maravillosas, sino que lo más importante es que
podemos hacer que sucedan y que se hagan realidad como si de magia se tratara.
Si hemos oído bien, somos
ordenadores, pero además nosotros mismos hacemos los programas a medida para nuestra
vida. Los programas mentales los podemos cambiar y reprogramar, eso si tenemos
que hacerlo nosotros con nuestro cerebro. Por tanto nosotros mismos podemos
cambiar y mejorar las cosas, somos los que podemos programar, somos en
definitiva los programadores de nuestra vida.
Nos programamos, por tanto,
cuando en base a nuestra experiencia del pasado nos enfocados en nuestro futuro
(en lo que queremos y deseamos), construimos el programa por el que vamos a
guiar nuestra vida, nuestras decisiones y nuestros actos. Y esto solamente lo
podemos hacer en el presente. De esta manera cuando, hacemos cosas nuevas,
cuando innovamos, se crean nuevas neuronas y conexiones en nuestro cerebro, nuevas
células que forman esos circuitos o programas mentales que necesitamos para avanzar
y convertir nuestros sueños en realidad.
Sin embargo, no es una cosa
sencilla,todos tenemos inercias, virus, programas antiguos (las creencias
limitantes) que ya no nos sirven, que nos limitan. Todos tenemos experiencias, pensamientos,
sentimientos en definitiva impactos del pasado que son un lastre, que nos
bloquean, nos limitan y nos hacen sentir miedo, inseguridad. Hoy la gran
noticia es que todo eso lo podemos cambiar y mejorar.
Necesitamos, por tanto,
borrar esos virus, esos miedos y poner en nuestro cerebro nuevos programas,
pensamientos y sentimientos que nos hagan crecer, que nos den más fuerza, más
energía, más vida y que nos ayuden en nuestro propósito de ser felices en la
vida. Es fundamental crearnos un buen estado de ánimo para activar al máximo
las conexiones neuronales y el proceso de regeneración neuronal que nos hacen
sentirnos bien, más creativos, más auténticos y que nos saca la mejor versión
de nosotros mismos.
Podemos recordar
experiencias positivas del pasado que nos dan fuerza y traer a nosotros
sentimientos que nos hagan estar bien y para ello tenemos que entrenar el
cerebro. Si entrenar nuestro cerebro, como si de un músculo se tratara.
Además tenemos que tener
confianza en nosotros mismos para creer, crear y estar totalmente comprometidos
con nuestros sueños (porque el viaje no es gratis) y uego adquirir los
conocimientos necesarios, rodearnos de la gente adecuada y liderar un barco que
queremos conducir (el barco de nuestra vida).Un barco que será sólido, aunque
atraviese por tormentas y tempestades que tarde o temprano vendrán, pero también
un montón de oportunidades que hacen que merece la pena pensar que la “Vida es
Bella”.
Para terminar quiero decir
que somos libres para diseñar nuestro futuro, elegir nuestro destino en la vida
y programarnos para ser más felices y hacer más felices a los que están con
nosotros. Ya sabemos que nos es fácil, pero se puede, todo esto se puede
aprender, se puede entrenar y podemos pedir ayuda a otras personas. Lo más
importante de todo es ser conscientes, darnos cuenta de que podemos y podemos
tomar las riendas de nuestra vida y decidir.
Se ha acabado ya vivir en
la mediocridad y tenemos que pasara la acción para cumplir nuestros sueños,
hacer lo que tenemos que hacer para al fin poder utilizar un arma muy poderosa
que es el poder de la mente.
Os ha gustado ? Por favor
enviarme vuestros comentarios y aportaciones para poder seguir creciendo en el
camino personal y así ayudar a otras muchas personas.La
semana que me viene seguiremos tocando el tema de desarrollo personal y tocaré
las claves para superar los miedos.
Se os quiere ¡¡¡
Con cariño: Eloy Rubio Aranda
Fundador y CEO de
Solunova (Innovación para tu vida)
Consultoría y
Formación en Innovación y Estrategias de Negocio.Mentoring para emprendedores.
Dr Layna Serrano 24B
Bajo A 19002 Guadalajara
Tel: 690644552
Email: erubioar@gmail.com
Web: http://solunova.net
@Eloyru Facebook+Linkedin (Eloy Rubio Aranda)
La positividad, vivir el día a día con plenitud, dejar a un lado los malos recuerdos, pensamientos; prescindir de lo material para pasar a rodearse de gente que quiere compartir con uno cosas alegres y bellas...me parece maravilloso.
ResponderEliminarAnónimo, me parece maravilloso lo que tú tambien planteas.Así me gusta que soñemos despiertos.Un mundo mejor es posible ¡¡ Un abrazo ¡¡¡
EliminarMagnífica reflexión, actuar y crear aquellas cosas que nos apasionan y, por lo tanto, que nos hagan felices.
ResponderEliminarEnhorabuena Eloy.