Esta semana en el blog #InnovArte os quiero hablar de
innovar como el arte de transformar las cosas y sobre todo de las personas, todo
ello desde el corazón.
Y es que sabemos que la innovación la hacemos las personas,
las personas que se atreven a cambiar las cosas y la base de todo el proceso,
es que el cambio lo tenemos que realizar dentro de cada uno de nosotros.
Y cambiamos cuando nos formamos, cuando aprendemos, cuando
hacemos, cuando emprendemos nuestro proyecto personal, proyecto de vida o de
negocio. En definitiva cuando le damos sentido a nuestras vidas.
¿Para qué voy
a cambiar? ¿Para qué voy a innovar ?
Todo el mundo habla de innovación, pero ¿ Qué es para mí innovar ?
Ya lo hemos comentado en otras ocasiones, innovar es
transformar el talento de las personas en resultados positivos.
Por tanto, ¿ Qué necesitamos para innovar ? ¿Qué necesitamos
para transformar las cosas ?
Lo primero y más básico que necesitamos es el talento, tenemos
que saber descubrir nuestro talento y el talento de las personas que van a
colaborar con nosotros. Y que todos tenemos talentos excepcionales si sabemos
descubrirlos y por tanto nos convertimos en auténticos exploradores para
encontrar nuestros recursos y potenciales, así como el de nuestros
colaboradores.
Además de buscarlo y por tanto encontrar talentos, lo
tenemos que desarrollar y eso lo hacemos si lo sacamos y lo ponemos en valor.
Así mejoramos nuestras habilidades, capacidades y actitudes para poder poner en
marcha nuestro proyecto, bien sea de vida o personal, profesional o de negocio.
Por tanto el proceso de innovación comienza cuando afloran
esos talentos y por tanto empezamos a crear, liderar y podemos transformar la
realidad que nos ha tocado vivir.
Además ponemos en valor ese héroe que llevamos dentro y que
ha decidido atreverse, soñar y ponerse en marcha, para guiar, para inspirar a
otras personas desde el emprendimiento y desde la innovación.
¿ Pero sabemos a dónde vamos ? ¿En qué nos hemos enfocado ?
¿Qué vamos a hacer ?
No podemos abandonar nuestro sueño, nuestro foco.
Y metidos en la senda de la innovación, aquí es fundamental
comunicar bien lo que vamos a hacer con nuestro equipo, personas y
colaboradores, empatizar con ellos. Es clave la motivación nuestra y del
personal para seguir el camino y no abandonar.
Necesitamos mucha confianza y fe para seguir avanzando, nos
enfrentamos con problemas que aparecen y los afrontamos, los vemos como
oportunidades, son piedras en el camino que tenemos que saltar. Como somos más
grandes que los problemas los podemos solucionar.
LA FE MUEVE MONTAÑAS Y ASÍ NO DEJAMOS DE INSISTIR.
Tenemos un camino largo y duro, pero apasionante.
Va a merecer la pena el esfuerzo ¡¡ No nos podemos rendir
ahora ¡¡
Y sacamos toda la actitud positiva, la fuerza y ese espíritu
emprendedor que llevamos dentro.
Necesitamos creer en nosotros mismos y en nuestro proyecto,
en nuestra gente.
No olvidemos amar lo que hacemos y sobre todo saber para qué
lo vamos a hacer.
INNOVAR ES TRANSFORMAR CON VALENTÍA
¿Pero cómo llegamos a ser valientes? Partiendo siempre del
corazón. En efecto, la etimología enseña que valentía/coraje viene del latín
cor, precisamente el corazón. Por lo tanto, la valentía es una acción del
corazón.
Para innovar necesitamos ser valientes para hacer lo que
creemos y para ello nos tenemos que dedicar a la formación del corazón, para
transformar las cosas partiendo del corazón y por tanto poder vencer a los
miedos, las dudas y tantas cosas que nos encontramos en el proceso.
Innovar desde el corazón para tener un corazón fuerte,
sincero, generoso y lleno de amor, sin duda podremos hacer un proyecto grande, creativo
y que realmente va a transformar todo lo que pille a su paso y por tanto la
innovación será algo exitoso, algo grande.
Ahora con amor y pasión, el deseo es mayor que los miedos
que tenemos.
Solamente el amor nos puede sacar adelante, ahora tenemos la
mayor de las fuerzas con nosotros, la fuerza del corazón, la fuerza del amor.
Ahora la innovación es desde el corazón y ese espíritu que
nos impulsa ahora es invencible.
Ahora estamos más seguros de que vamos a conseguir nuestros
objetivos y que podemos transformar las cosas.
Nos vamos transformando a nosotros mismos, poco a poco.
Innovar es cuestión de personas y las personas se mueven por
las emociones, por la fuerza del corazón.
Es necesario para innovar gestionar nuestras emociones y las
emociones de las personas de nuestro equipo para convertirlas en algo positivo,
para convertirlas en acción.
Somos personas y la innovación necesita ilusión, optimismo y
ganas para poder caminar.
No nos podemos rendir ¡¡
Y por supuesto sacar nuestros valores, aquellas raíces que
nos hacen sacar todo lo bueno que tenemos y de los demás.
No podemos construir nada serio sin valores. Es fundamental
tener unos buenos valores que nos ayuden en el proceso del cambio.
Por tanto para terminar quiero decir que innovar es
transformar desde el corazón, ese corazón que lo tenemos que desarrollar en
nosotros mismos.
Solamente desde la fuerza del corazón podremos realmente
transformar las cosas porque actuaremos sobre las personas que son los
verdaderos agentes del cambio y la transformación.
POR ESO LA VERDADERA INNOVACIÓN Y TRANSFORMACIÓN ESTÁ EN LA EDUCACIÓN
#ESCUELADELTALENTO
Gracias de corazón ¡¡¡
#Seosquiere
Eloy Rubio Aranda
Fundador y CEO de Solunova (Innovación para tu vida)
http://www.solunova.net